El 23 de junio de 2014 el Departamento de Agricultura de la Generalitat de Cataluña publicó un proyecto de Decreto que pretende permitir la captura de 53.000 pequeñas aves (jilguero, pinzón, verderón y pardillo) en su naturaleza. Las aves serían cazadas con el sistema de redes abatibles para su cría en cautividad.
Según el Institut Català d’Ornitologia (ICO), el estado de conservación de tres de las cuatro especies nombradas está catalogado como “vulnerable”. Por parte de la Generalitat se reconoce que existe un retroceso en la población de estas aves, pero en cambio no se relaciona con la caza y el uso de estas aves para hacer negocio con su canto.
PACMA ha presentado una solicitud a la Generalitat de Catalunya pidiendo que se archive el proyecto de Decreto, ya que este vulnera la vigente Ley de Protección Animal. Con la aprobación de este Decreto se legalizaría la privación de libertad de estos animales, de por vida, y se les sometería a las terribles condiciones que sufren las aves destinadas a concursos de canto: jaulas más pequeñas que una caja de zapatos, apiladas hasta el techo y sin recibir luz directa del sol.
Esta decisión se suma a la que ha tomado el PSOE andaluz, y que también hemos denunciado desde el Partido Animalista, sobre la autorización de caza de 122.000 aves migratorias.
Desde PACMA lamentamos que, desde los distintos gobiernos autonómicos, se esté fomentando y favoreciendo al lobby de los cazadores. En su lugar se debería estar protegiendo la vida de los animales, en cumplimiento de la Ley de Fauna y Flora, que prohíbe expresamente la caza de especies no cinegéticas, por lo que además de la moralidad de estas autorizaciones, está en entredicho la legalidad de las mismas, tanto en Andalucía como en Cataluña.