El ministro de Industria, Energía y Turismo ha lamentado la decisión del gobierno boliviano de expropiar TDE, una decisión enmarcada en una política sistemática de nacionalización de determinados sectores desarrollada desde 2006 y que tiene como base la Constitución boliviana.
Esta política de nacionalizaciones ha afectado a distintas empresas de distintos sectores de diferentes países, por lo que el ministro Soria señaló en el Congreso que no se observan signos de discriminación contra España o contra las empresas españolas en esta decisión del gobierno boliviano. El decreto de expropiación contempla además la indemnización a Red Eléctrica por los activos nacionalizados, para lo cual la compañía y el gobierno boliviano iniciarán un proceso negociador.
El gobierno de España confía en que el gobierno de Bolivia negocie con la empresa REE para alcanzar una compensación justa que satisfaga a todas las partes. El Gobierno ha constatado la voluntad de diálogo de Bolivia, según los contactos diversos mantenidos entre miembros de ambos gobiernos. El presidente de Bolivia, Evo Morales, y otros miembros de su gabinete, reiteraron esta posición al secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica español, Jesús Gracia, en una entrevista realizada ayer.
El gobierno de España, señaló el ministro Soria, acompañará a REE en este proceso de negociación y prestará todo el apoyo que sea necesario y posible a la empresa en la defensa de sus legítimos intereses.
El ministro de Industria, Energía y Turismo quiso establecer además las claras diferencias entre la nacionalización de TDE y el proceso de expropiación de YPF por parte de las autoridades argentinas, una decisión ilegal y discriminatoria, ya que afecta únicamente a la participación de la española Repsol en una compañía, y en la que ha habido una ausencia de diálogo para alcanzar acuerdos, señaló el ministro.