En este aniversario, Oceana subraya que el actual ritmo de protección es demasiado lento y dentro de poco será demasiado tarde para especies bandera como los tiburones, el pez espada o el atún atlántico y para hábitats tan importantes como los corales de profundidad.
Según el texto del acuerdo, los países firmantes tienen la “Obligación General” de proteger y preservar el medio ambiente marino al tiempo que ejercen el derecho de explotar sus recursos. Sin embargo, según los últimos datos, la protección de los océanos apenas supera el 2% y además el 87% de las pesquerías se encuentran completamente explotadas, sobreexplotadas o agotadas. De seguir así, y sumando efectos como el cambio climático, la contaminación o la destrucción de hábitats, se estaría poniendo en riesgo la existencia de un gran número de especies.
Xavier Pastor, Director Ejecutivo de Oceana en Europa, afirma que “es una triste noticia conmemorar el aniversario de la Ley del Mar cuando tras cientos de compromisos la mayoría de los países siguen ajenos a la aplicación de políticas efectivas de gestión y protección de los mares y sus recursos. El asumir los compromisos establecidos bajo el paraguas de las Naciones Unidas debería ser una garantía, pero cuando se trata de los océanos se siguen haciendo oídos sordos a las responsabilidades adquiridas por convenios internacionales”.
UNCLOS (United Nations Convention on the Law of the Sea) establece las directrices para el comercio, salvaguarda y gestión de los recursos del mar. El acuerdo se adoptó el 10 de diciembre de 1982 por 119 estados en Montego Bay (Jamaica) y hoy en día son un total de 164 los países firmantes.